Green Bay Packers conquistó contra pronóstico su cuarto título de la Superbowl al vencer a Pittsburgh Steelers en una final en la que Aaron Rodgers, Quaterback de los Packers, rozó la perfección.
Fue Vince Lombardi quien en la década de los sesenta, cuando se fusionaron las ligas AFC y NFC en la actual NFL, condujo al triunfo a los Green Bay Packer en la primera Superbowl. Años más tarde el trofeo de campeón pasaría a llevar su nombre, y ahora, tras la victoria anoche de Green Bay ante Pittsburgh, se podría decir que el trofeo vuelve a su lugar de origen.
La ciudad más pequeña de los Estados Unidos es desde esta pasada madrugada la más grande. A ello contribuyó el trabajo del merecido MVP del partido, Aaron Rodgers. El Quaterback de los Cheese Heads - así se les conoce a los Green Bay Packers - tuvo la oportunidad de demostrar que los años que pasó a la sombra del gran Favre - último Quaterback en llevar a los Packers al título - no pasaron en balde. Su cara lo decía todo. Desde el kick off inicial había una sonrisa permanente en su cara; esta disfrutando, y así es como se consiguen las grandes victorias.
Las estadísticas en la NFL son de vital importancia. Pues bien, si atendemos a las de Rodgers en el partido, son como para quitarse el sombrero: 24 pases completados de 39 intentados para 304 yardas y 3 Touchdowns. Si hablábamos en la previa de que había que tener en cuenta el juego de carrera de los Packers, Rodgers nos ilustró con un juego de pase, en el que encontró, sobre todo, a dos grandes aliados: Nelson y Jennings. El primero completó nueve recepciones y un Touchdown, mientras que el segundo, anotó dos Touchdowns en cuatro recepciones.
El juego de carrera de los Packers quedó para ir avanzando yarda a yarda en el camino hacia la red zone de los Steelers. El rookie Starks volvió a ser la referencia en el juego de carrera de Rodgers. El Quaterback de Green Bay no temió a la defensa del MVP defensivo del año Polamalu que se antojaba su gran pesadilla.
Quien seguro no habrá pasado la mejor noche de su vida habrá sido Ben Roethlisberger, Quaterback de Pittsburgh Steelers. Desde el inicio tenía cara de pocos amigos, cosa que se agudizó cuando al final del primer cuarto, y con el partido 0-7 - Touchdown de Nelson tras recibir un pase de 29 yardas a 4:33 para el final del primer cuarto - para los Packers, fue interceptado por Collins, que corrió 37 yardas para marcar el segundo Touchdown de la noche y poner muy cuesta arriba el partido para los Steelers (0-14).
No reaccionaba Roethlisberger y su equipo sólo fue capaz de anotar un Field Goal de 33yardas en el segundo cuarto, mientras Rodgers seguía dando lecciones de juego al mariscal Steeler. Así, antes de llegar al tiempo muerto obligatorio de los dos minutos, el Quaterback de los Packers conectó otro gran pase, esta vez de 21yardas, con Jennings, para poner el 3-21 en el marcador. Esto enfadó definitivamente al Quaterback de los Steelers que tardó 20 segundos en contestarle, conectando con Ward para reducir la diferencia y mandar el partido al Half Time Show 10-21.
En la reanudación se vio a otros Steelers. Las malas noticias habían cambiado de bando, y es que Woodson, el mejor especialista defensivo junto con Matthews, de los Cheese Heads, tuvo que abandonar el partido lesionado. Roethlisberger parecía que se había quitado la presión de encima, pero el partido lo tenía muy complicado. Sólo en dos ocasiones, 1997 y 2009, se habían remontado diferencias de más de 10 puntos al descanso. Sin embargo, el mariscal de campo de Pittsburgh no cesó en su empeño y logró el único Touchdown del tercer periodo a poco más de dos minutos para llegar al final del cuarto en una jugada de carrera de Mendenhall (17-21). Había partido.
La pelea defensiva del último cuarto fue total. Rodgers sufrió con la defensa de los Steelers, aunque a falta de 11:57 para el final volvió a conectar con Jennings para poner 11 de diferencia en el marcador (17-28). Los Steelers necesitaban un milagro, que cerca estuvieron de conseguir, no en vano, un pase de 25yardas de Roethlisberger sobre Wallace a falta de 6:30 para el final, y una posterior conversión de dos puntos, les ponían a tiro de Field Goal para mandar el partido a la prórroga (25-28).
Sin embargo, en la posterior jugada de ataque de los Packers, a falta de 2:07, Crosby anotó un Field Goal de 23yardas (25-31). Los Steelers estaban a tiro de Touchdown, pero la defensa de los Packers acabó con las esperanzas de los Steelers al los que no permitió llegar a mitad de campo, para lograr su cuarto título de la Superbowl y devolver el trofeo a su lugar de origen.
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